La cumbre del G-7 en Canadá aborda la creciente tensión entre Israel e Irán

Ottawa, Canadá.- La escalada bélica entre Israel e Irán figura entre los temas de la agenda que discuten, desde este lunes, los miembros del Grupo de los Siete (G-7), integrado por los jefes de Estado y de Gobierno de Estados Unidos, Canadá, Francia, Alemania, Reino Unido, Italia y Japón.

La cumbre se extenderá hasta el miércoles en la localidad canadiense de Kananaskis, con una creciente preocupación por los constantes bombardeos con misiles entre las tropas de Irán e Israel, que han dejado más de 200 víctimas, incluidos heridos.

Los delegados de esos países han expresado incertidumbre acerca de la ofensiva militar entre las tropas israelíes e iraníes.

En la reunión participará el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, a pesar de las protestas contra su política migratoria.

El conflicto bélico en el Medio Oriente ha obligado a modificar la agenda original del G-7.

Sobre lo que ocurre en el Medio Oriente, la presidenta de la Comisión Europea, Úrsula von der Leyen, considera: “Estoy convencida de que Irán es responsable de la situación”.

Sin embargo, entiende que “por supuesto, que una solución negociada es a largo plazo, la mejor salida”.

El gobierno de Japón, que ha mantenido relaciones muy estrechas con Irán, condena los ataques israelíes y los califica como «profundamente lamentables».

El presidente de Francia, Emmanuel Macron, aboga por que Irán vuelva a las negociaciones sobre el programa nuclear, al pedir moderación a las autoridades de los países en conflicto.

Además de la escalada bélica entre Israel e Irán, los líderes del G-7 tienen en la agenda discutir la guerra entre Rusia y Ucrania.