El mes de junio tiene maravillosas fiestas. Hoy trataremos en este espacio dos muy bellas, que se celebran seguidas, los Sagrados Corazones de Jesús y de María.
La solemnidad del Sagrado Corazón de Jesús:
se celebra el viernes siguiente a la solemnidad del Corpus Christi, sugiriéndonos que la Eucaristía no es otra cosa que el Corazón mismo de Jesús, de Aquel que de corazón cuida de nosotros.
En esta fecha, también se lleva a cabo la Jornada Mundial de Oración por la Santificación de los Sacerdotes.
La celebración se remonta a 1672, gracias al sacerdote Juan Eudes. Además, las revelaciones privadas a Santa Margarita María Alacoque, tuvieron un papel crucial en la difusión de esta devoción.
El 27 de diciembre de 1673, Margarita tuvo su primera visión de Jesús, quien compartió con ella la inmensidad de su amor por la humanidad. Jesús le expresó que su Corazón ardía en llamas de caridad que debía difundir.
Las visiones continuaron, inspirando las devociones de los nueve primeros viernes de mes y la hora santa de adoración. Asi nació esta fiesta para honrar y reparar las ofensas al Sagrado Corazón mediante la oración.
Santa Margarita comunicó de lo recibido que los devotos que comulguen dignamente durante nueve meses consecutivos recibirán el don de la perseverancia final y la gracia de los sacramentos.
En 1856, el Papa Pío IX extendió la fiesta a toda la Iglesia, y en 1995, San Juan Pablo II instauró el mismo día la Jornada Mundial de Oración por la Santificación del Clero.
Este viernes 27 de junio, es la fiesta del Sagrado Corazón de Jesús, y el sábado 28 la fiesta del Sagrado Corazón de María.
La Fiesta del Inmaculado Corazón de María se celebra al dia despues (sabado) de la fiesta del Sagrado Corazón de Jesús. Y es que en María todo nos dirige a su Hijo. Los Corazones de Jesús y María están muy unidos en el tiempo y la eternidad…
La Iglesia nos enseña que el modo más seguro de llegar a Jesús es por medio de su Madre. Por ello, nos consagramos al Corazón de Jesús por medio del Corazón de María.
Finalmente, compartimos estas bellas palabras dedicadas a Ella: “Nunca temas amar demasiado a la Santísima Virgen María. No hay forma de amarla más de lo que Jesús la amó.” – San Maximiliano Kolbe
«No debe separarse lo que Dios ha unido tan perfectamente. Están tan juntos Jesús y María que quien contemple a Jesús ve a María; quienquiera que ame a Jesús, ama a María; toda persona devota de Jesús, es devota de María». – San Juan Eudes
jpm-am
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